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También es trascendental la posición que ocupa el prelado de Roma. Este recibe el título de papa y se le considera no solo obispo de su diócesis sino dirigente de la Iglesia católica entera, es opinar, Pastor y Doctor de todos los cristianos adecuado a que es considerado el sucesor de San Pedro.[1] Su opción ha ido variando a lo prolongado de la historia; desde el siglo XI es favorito por el colegio cardenalicio en el cónclave.
Al respecto, monseñor Riccardo Battocchio, Secretario Singular de la XVI Asamblea señaló que, “El Instrumentum Laboris para la Segunda Sesión de la XVI Asamblea será diferente del preliminar. Si para la Primera Sesión Bancal importante poner de relieve la amplitud de los temas a tratar, el documento de trabajo para la sesión de octubre pretende, en cambio, destacar algunos nudos que hay que descifrar para objetar a la pregunta Cómo ser una Iglesia sinodal en delegación, tomando en cuenta el camino repaso hasta ahora y proponiendo argumentos teológicamente fundamentados próximo con algunas propuestas concretas para ayudar al discernimiento confiado a los miembros de la asamblea”.
Iglesias sin cargo propia: Tras finalizar la Bancal comunista no se les ha célebre todavía un prelado propio.
El credo encuentra una explicación sistemática en el Catecismo de la Iglesia católica, consentido en 1992 por Juan Pablo II y cuya traducción definitiva fue promulgada en 1997.
La autoridad del mitrado de Roma, su cargo Internamente del magisterio de la Iglesia católica ha sido expuesta en diversos momentos de la historia y de modo distinto en el Concilio Vaticano I.
Órdenes religiosas de derecho diocesano: dependen del prelado de la diócesis en la que han sido reconocidas.
Confesar los pecados mortales al menos una ocasión cada año, y en peligro de crimen, y si se ha de comulgar.
[…] Es bueno que la Iglesia dé este paso con la clara conciencia de lo que ha vivido en el curso de los últimos diez siglos. No puede atravesar el umbral del nuevo milenio sin animar a sus this page hijos a purificarse, en el arrepentimiento, de errores, infidelidades, incoherencias y lentitudes. Examinar los fracasos de ayer es un acto de nobleza y de valentía que nos ayuda a reforzar nuestra Certeza, haciéndonos capaces y dispuestos para afrontar las tentaciones y las dificultades de ahora.[149]
Santidad: la Iglesia católica, a pesar de los pecados y faltas de cada singular de sus miembros que aún peregrinan en la Tierra, es en sí misma santa pues santo es su fundador y santos son sus fines y objetivos. Asimismo, es santa mediante sus fieles, ya que ellos realizan una acción santificadora, especialmente aquellos que han alcanzado un stop graduación de virtud y han sido canonizados por la misma Iglesia.
El gobierno de la Iglesia católica reside en los obispos considerados como colegio cuya vanguardia es el obispo de Roma, el papa. La potestad de este colegio sobre la Iglesia en su totalidad se ejerce de modo solemne en el concilio ecuménico, asamblea de todos los obispos del mundo presidida por el papa, que es convocado cuando hay que tomar las decisiones más importantes, en materia de Seguridad (dogmas), de ético o por otras razones pastorales.
Seguirán las fases de redacción del documento propiamente dicho y un doctrina de amplia comprobación hasta que el Consejo Ordinario apruebe el documento que será sometido al Santo Padre para su aprobación definitiva.
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Mueren varios soldados norcoreanos tras exceder la zona desmilitarizada fronteriza con Corea del Sur
En el caso de la Iglesia greco-católica rusa, los dos exarcados apostólicos existentes en Rusia y China antes de las revoluciones marxistas no han sido aún reactivados por la Santa Sede, dependiendo los fieles en Rusia de los obispos latinos y ucranianos.